ARENA DE PLAYA


Bajo el cielo de tus miradas me oculté tras el silencio, las palabras se entremezclan y, a veces, no dicen casi nada. Con el sol sobre mi espalda camino en esas playas, tranquilas y lejanas en las que una a menudo no siente casi nada. Mezclándome en la grandeza de esa belleza, casi sin límites, perderé la cabeza para poder ser arena de playa, entonces, sentiré como la gente pasa, se sienta sobre mí y, plácida reposa mirando el mar que le alimenta su calma. Yo allí tirada bajo ellos será la manta que les da reposo, mientras, aprovecharé para esconderme sin necesidad de tener que decir nada. Por la noche me quedaré allí tranquila y la luna seguro me canta, me acunará entre sus brazos y el mar seguro la acompaña.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No hi ha res mes insignificant que un granet de sorra.... diuen. El mar aqui las coge i las deja alla, a veces las arrastra dentro del mar , en la profundidad donde peces las aspiran y las vuelven a expulsar, de nuevo el mar las coje y a otra playa las va a llevar hoy aqui y mañana alla, sin parar, en cada playa, con otros, otra realidad formaran, nueva gente, pajaros y animales la pisaran, en los pies de los humanos viajaran y mil y una nuevas historias en silencio viviran. Otro dia , otra estacion, igual el aire las hara volar y en otro paraje lejos del mar estaran. Fuimos rocas algun dia y golpe a golpe, ola a ola en arena nos convertiremos. No esta mal como final.....