CARAMELOS


Caramelos de colores, encaramados del cielo al suelo van, rojos, naranjas y amarillos mezclados pintan estelas que otros borrarán. Entre las patas de esa araña sintiéndote así de pequeña, tan pequeña que no puedes casi ni respirar, la dulzura la vas recibiendo pero no la puedes saborear. Tan largo el camino y tan deprisa el tiempo va que de niño a viejo recorres el mundo y no te da tiempo casi para mucho más. Mientras, pierdes el tiempo en pensar lo que no debes hacer y, al pensar tanto las horas se suceden, bonitos minutos que vas a perder. Es que no aprendes que es mejor jugar que seguir las reglas, prefieres quedarte mirando mientras los otros se comen todos los caramelos y cuando ya no quede más que el último lo probarás? Descubrirás entonces, en ese momento en el que ya no habrá, que te gustó hacerlo pero no podrás probar ni uno más. Así pues, tira de ellos, sus bellos colores gritan tu nombre para te mezcles en ese alboroto de sabores, conseguirás ser un color nuevo que otros querrán probar.

1 comentario:

Pato´s dijo...

bello relato!!
pareceria como si los estuviera viendo, saboreandolos.

besitoss amiga.