Entre el mar y la luna hoy creo que me quedo con esa calentura que abrasa con tanta calidez. Miro el cielo y pierdo toda mi cordura, enloquezco ante la perfección de un universo casi sin compasión. Veo extremos opuestos que se distribuyen en una armonía desmesurada y, boquiabierta me quedo ante ti asombrada. Placentero, arrollador y apasionante es el tacto que siento a mi alrededor, capto la esencia ilógica de una naturaleza llena de instinto animal, araño y desgarro con cariño la tela que cubre todo este espectáculo y, si pudiera, seria tuya entremezclándome en esa locura que sin razón alguna se desboca en el interior, de este mi ser, que admira con descaro lo que un paisaje puede hacer sentir al corazón. Como un amante casi perfecto, se acerca ardiente acariciando mi piel con ese cálido manto y, deseándolo desde mi interior pierdo la sensación al no poderlo hacer mío. Mientras, sigo revoloteando a su alrededor hasta ver como desaparece, frío, calculado y lejano……., todo queda distante y se pierde una vez más en la oscuridad de la noche para dar paso a otro nuevo amanecer.
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