DECEPCIÓN


Quiero estar allá arriba en la colina viendo el día pasar de lejos porque si me tienen que dañar prefiero no poseerlo.
En pocas horas todo se convierte en barro y en dos segundos las tornas se giran, de ser divino pasas a pisar el suelo descalzo y de repente te conviertes en humano. Tengo el sentimiento averiado, no funciona correctamente porque alguien lo ha tocado, me desmontó como si fuera un reloj viejo y consiguió repararme, pero luego me dejó transformándome como humano de carne y huesos. Después de un uso desmesurado caí como reloj viejo abandonado. Mis agujas hoy sienten que no quieren girar, sienten que prefieren no ver el tiempo pasar y ahora me he quedado parado. No hay Tic-tac, me quedé sin sonido de fondo, para qué me valen las horas si no quiero contarlas, para qué me vale la vida si hoy no la puedo escuchar.

De arriba a abajo con un golpecito caí de la nube, me convertí en escarabajo, otro bicho más en la faz de la tierra y, no digo que eso sea malo, sólo que con la decepción me quedé igual que otro ser humano más.

No, no bajaré de la colina hoy, dejaré el día pasar y detrás de un árbol me esconderé, inmóvil como un árbol bello, quizás de un haya, tranquilo y dando vida al bosque, donde las ardillas viajan sin tener que pisar asfalto, quizás así la decepción deje de habitar en mi interior.

No hay comentarios: